martes, 13 de mayo de 2014

Los seriales radiofónicos, emociones por entregas

Documental radiofónico
Realizado por: Radio Nacional de España
Fecha: 2014

La RNE, en esta ocasión, presenta un producto acerca de cómo el seriado radial evolucionó durante el siglo XX en España. Luego de que la BBC y la CBS dieran a conocer las radionovelas, poco a poco se fue difundiendo la nueva manera de entretención que influiría a muchos países y personas.

La radio, en España, se llegó a concebir incluso como algo sacro, algo que permitía reunir a la familia y a los vecinos alrededor de las voces salidas del aparato. Paralizaba  a la gente. Cada vez que había algún programa era necesario sentarse a escucharlo. Con esta imagen tan reveladora se deriva el resto del recuento histrórico, donde a través de diferentes personalidades y expertos en comunicación y radio, se pueden recrear los pasos y avances de las radionovelas españolas. 

Se comenzó con adaptaciones de diferentes textos y más adelante se fueron haciendo libretos exclusivos para este medio. Durante la década de los 50 la radio tuvo su época dorada ya que se implementaron modalidades supremamente interesantes. Además de tener tramas complicadas dejaban cada programa "en punta"; es decir, terminaban en el punto más álgido para que los radioescuchas se vieran "obligados" a sintonizar la emisora al día siguiente. Esta época fue tan importante que se llegaron a transmitir 8 programas diferentes diariamente.

Pese a esta popularidad y auge radial, la censura fue algo que la afectó fuertemente. Era necesario mandar con 48 horas de antelación los libretos para ser revisados y tener la aprobación. También hubo censura por parte de las marcas patrocinadoras. Sin embargo, había todo tipo de programas y géneros, que permitían llegarle a un amplio espectro de personas, constituyendo la radio como un fenómeno imprescindble del país.

Es indiscutible su importancia, pero la televisión llegaría para quitarle protagonismo. Durante los años 60 se desplazan paulatinamente las radionovelas, llevando a que cada vez se produjeran menos. Pedro Barea afirma que no es que la radio haya perdido poder, sino que la sociedad española cambió. La cadena SER transmite en 1988 su último dramatizado: "su última aportación al género. La Radio Nacional sería la única que mantendría la tradición de hacer programas de ficción (terror), con el fin de no perder parte de la cultura y costumbres españolas.

"Los seriales radiofónicos, emociones por entregas", es un documental supremamente detallado, con una gran cantidad de voces destacadas (Sautier, Soriano, Teófilo Martínez y Matilde Conesa, Lourdes Guerras, entre otros) que permiten entender el contexto y la función de la radio en España. Es un trabajo de memoria histórica muy importante, ya que explica cómo fue parte del siglo XX a través de la radio. Este producto es algo que todo país debería hacer, con el fin de no olvidar algo que significó y marcó la vida de quienes oyeron y aún hoy oyen radio.








martes, 1 de abril de 2014

Pablo Escobar, 20 años después de su muerte

 Por: RCN Radio

Pablo Escobar es, probablemente, el personaje que más ha afectado a Colombia ya que con muertes y violencia logró someter a un país débil, donde ni el mismo estado podía detener las barbaries cometidas por el "Capo" del narcotráfico. Este personaje marcó la historia, nos marcó a todos, incluso a las generaciones nacidas después de su muerte, y es por esto que es necesario retomar lo que fue su vida y desarrollo como narcotraficante.

Este documental radiofónico, producido por "RCN Radio",  muestra desde 1982 -cuando Escobar logra llegar al Congreso- hasta su muerte en 1993. Con varias voces y testimonios, se hace un recorrido por la década de los 80 y princicpios de los 90, años en que todo giraba alrededor de la violencia desatada por los carteles de la droga. 

Se narran los diferentes secuestros hechos por el Cartel de Medellín (Andrés Pastrana, Francisco Santos Calderón, Carlos Mauro Hoyos, entre muchos otros) que sumados a todas las muertes y magnicidios cometidos, como lo fueron el de Luis Carlos Galán, Rodrigo Lara Bonilla o el de la periodista Diana Turbay, dan un claro ejemplo de la brutalidad y capacidad bélica que llegó a tener el narcotráfico. Por último, luego de rescatar las voces de los afectados en toda esta tragedia colombiana, se explicita lo que sería una de las muertes más divulgadas y famosas en el país y, seguramente, en el ámbito internacional: el asesinato de Pablo Escobar Gaviria. En 1993, se le daría fin a una de las grandes pesadillas que hasta hoy deja heridas sin sanar.

"Pablo Escobar, el fin de una pesadilla" es un documental que logra informar y exponer un contexto difícil y delicado, el cual, en menos de una hora, da un panorama básico de qué pasó con este personaje tan controversial. Sin embargo, y esto es algo que me ocurrió a mí como oyente, la falta de música y efectos sonoros hace que el radioescucha se disperse y deje de prestar atención. Las voces de los narradores, sin negar su buen contenido, son planas, lo cual hace complicado que alguien se mantenga atento tanto tiempo. También le hacen falta más datos biográficos que sitúen y le permitan entender mejor al oyente, quién es y de dónde viene Pablo Escobar. De resto, se podría decir que es un producto que puede ayudar a informarse y complementar ciertos vacíos que se tengan frente al recorrido de este narcotraficante.




jueves, 27 de marzo de 2014

Tipos de Documental


En este texto, que se podría denominar como un catálogo, Kevin Lindenmuth clasifica y describe los diferentes tipos de documental que existen: expositivo, de observación, participativo y dramático.

El expositivo, como su nombre lo dice, expone una idea o un argumento con el fin de persuadir y hacer pensar al público de cierta manera. Generalmente se basa en la llave problema/solución para darle un atractivo al documental; es decir, a medida que éste se desarrolla, se plasma un inconveniente de tipo político, social, cultural etc. para luego plantear una posible salida del mismo. Se pueden/deben usar entrevistas con expertos, testimonios e imágenes que sustenen lo que la voz en off está intentando demostrar a medida que trasncurre el producto.

Luego, Lindenmuth describe el documental de observación, en el cual es de suma relevancia no intervenir. El (los) realizador (es) debe aguardar y mirar detenidamente lo que pasa orgánicamente en el espacio que está grabando. "Él está ahi para observar la vida y dejar que el espectador saque sus propias conclusiones cuando mire lo que se le muestra". Se debe respetar el orden del tiempo y en caso de darse algún tipo de conversación, sólo puede ser aquella que ocurre dentro del grupo en cuestión. Su objetivo es " (...) documentar discretamente lo que sucede". 

El siguiente tipo es el participativo. Aunque se parezca al expositivo- ya que ambos buscan demostrar un argumento- éste hace uso de una persona como presentador y guía del producto. Este individuo se encarga de darle el rumbo al documental, y es él quien expone las ideas para persuadir y también entretener al espectador. Por esta razón, se puede dar una" perspectiva mucho más sesgada del tema, puesto que todo está filtrado a través de su personalidad".

Por último está el documental dramático, el cual a través de la recreación busca construir un escenario y una situación imposible de documentar debido a que "la mayoría de las veces (...) dicho tema ya no existe". En caso de que los actores de la dramatización dialoguen, es probable que se esté tratando un docudrama, el cual es más cercano a una película de ficción que al mismo documental -factor importante para tener en cuenta.  Su propósito es sacar al público de su época y su realidad para mostrarle una perspectiva diferente de cosas pasadas.

Este texto es una guía base de los diferentes tipos de documentales que hay. Da diferentes ejemplos con los que el lector puede darse una idea clara de cómo son en realidad los subgéneros e incluso pasos de cómo llegar a clasificarlos de manera adecuada. Así que ya sabe, si tiene dudas al respecto, esta lectura le será de gran utilidad.







martes, 25 de marzo de 2014

Dos siglos de periodismo, 200 años de opinión

 Producido por: UNIMINUTO

El periodismo de opinión siempre ha buscado ser el anti-poder, el desequilibrio y el obstáculo para los diferentes gobiernos. Ha procurado que tanto los aspectos positivos y, en especial, los negativos sean divulgados y escuchados para no permitir que se pasen por alto las acciones que afectan a millares de personas o, incluso, a un pequeño nicho social. Es por esta característica inherente al periodismo, que a lo largo de la historia colombiana se ha asesinado y censurado a quienes, a través de la palabra y la libre expresión, han buscado una equidad informativa y justa.

El documental "Dos siglos de periodismo, 200 años de opinión", es un reconocimiento y un agradecimiento a aquellos periodistas, tanto profesionales como empíricos, que pese a las constantes muertes y amenazas, continuaron expresando lo que sentían y lo que debían saber los colombianos.

Por medio del recorrido que hace un periodista con miras a encontrar testimonios que le permitan recontruir la historia del periodismo en Colombia, se muestra breve pero claramente el martirio y el encanto de ir en contra de los grandes poderes. Muestra cómo Antonio Nariño (sancionado y exiliado por sus ideas progresistas) dio pie para el nacimiento del periodismo de opinión gracias a la llegada de la imprenta en 1790 y cómo desde un principio, buscó retar y deslegitimar al estado.

Además de remitirse a los primeros vestigios de este género informativo, también retoma contextos más actuales, como lo fue el doloroso magnicidio de Jaime Garzón, quien usaba el humor para decir las verdades de un país corrupto e inequitativo. Como este, hay miles de casos que el documental no menciona debido a lo corto que es, pero sí deja en claro que en Colombia no se respeta el derecho a la libre expresión. Sin embargo, este documental hace énfasis en que en lo momentos más aciagos y peligrosos, surge periodismo de mejor calidad, mucho más directo y más certero; es decir, sin importar los golpes, siempre habrá personas dispuestas a hacerse escuchar y respetar.

Este es un buen producto audiovisual de corta duración que, en lo personal, deja un sabor amargo sobre la realidad de este país pero al mismo tiempo, un alivio de que haya gente persistente dispuesta a inmolarse por una información justa. Como aclara Claudia López en el documental, el periodismo es un oficio muy gratificante por más enemistades y peligros que conlleve practicarlo. Así que a quienes les interese la historia de esta vocación en Colombia, puede usar este producto realizado por UNIMINUTO como guía para saber qué ha pasado y qué pasa detrás de los medios de comunicación que usted, querido lector, lee y ve a diario.

martes, 18 de marzo de 2014

Historias del Trasnmilenio



Miradas que se cruzan y se evaden. Pensamientos que desean ser escuchados y otros que prefieren permanecer mudos y encerrados. Vidas colmadas de desasosiego, felicidad, tristeza y hasta vacías, son aquello que abunda en el transporte público masivo de Bogotá: el Transmilenio. Con cualquier persona se destapa una historia llena de experiencias, experiencias que no necesariamente se revelan a través de lo que dicen, sino de lo que su cara, sus gestos, su ropa y su forma de estar en el mundo tienen por contar.

Absorto, fijando su profunda y desconfiada mirada en nosotros, había un anciano de quijada pronunciada y unas arrugas que hacían de su cara un océano de ondas y anécdotas.  Estuvo de pie todo el trayecto, cambiando de posición y  balanceando sus piernas para que el peso no le hiciera más amargo el camino. Estaba solo -probablemente casi siempre lo está- y lucía exhausto, no necesariamente por algo que le acabara de ocurrir, sino por el difícil pasar de los años. Vestía de la manera a como se acostumbra imaginar y ver a los señores de su edad: pantalón oscuro, zapatos embolados, camisa de cuadros y chaqueta habana. Su mirada punzante se desapareció en algún momento del camino, no recuerdo en cuál exactamente, pero eso sí, dejando varias dudas de su vida y de quién era en realidad.

La música acoge todos los espacios y esta caja roja móvil que se dirigía de Usme (suroriente) hacia el norte de Bogotá, no fue la excepción. Dos hombres morenos, no mayores de 25 años, acallaron el silencio incómodo que retumbaba en los oídos de los viajeros. Con pantalones amplios, camisetas muy grandes, pañoletas envueltas en sus cabezas y “cachuchas”, empezaron a cantar  con voces empíricas, fuertes y talentosas. Esta vez no solo sus caras y su forma de vestir eran las encargadas de decir quiénes eran ya que a través de una letra visceral y vivencial se abrieron sin temor y con confianza ante un público variado y, en parte, escéptico. Con una pequeña grabadora que cargaba uno de ellos en sus hombros se alternaban para criticar y denunciar la pobreza y los vejámenes que sufren ellos y la sociedad colombiana. Decían la verdad, nadie que viera sus rostros lo dudaría. Al acabar la canción pidieron un aplauso mientras pasaban pidiendo  monedas y sonrisas genuinas , sabiendo que no eran los únicos con vidas difíciles pero sí de los pocos que podían expresarla por medio de la música. Se bajaron y el silencio entró nuevamente por las puertas automáticas rojas.

Yendo de norte a sur por la Avenida Caracas, un espejo que se encontraba en la parte delantera del transporte permitía ver un hombre de pelo negro y de tez blanca que a menudo es ignorado pero que cumple un rol sumamente relevante: el de llevar a todos los allí presentes a sus destinos. Mientras el olfato comunal percibía el olor invasor de la “lechona” colombiana y algunas bocas lo comentaban entre sí, este señor encargado del volante, no se inmutó. Posiblemente ya ha hecho tantas veces el recorrido que el olor no le sorprende o está tan concentrado en su trabajo que no hay espacio para nada más en su cabeza. La chaqueta café que usan todos los que manejan un Transmilenio y su cara seria hacían prácticamente imposible descifrar a este hombre. 

A su lado derecho había un letrero prohibiéndole a todos los pasajeros hablarle al conductor y aunque es de las pocas reglas que se cumplen en este medio de transporte, ¿será que él quiere que nadie le dirija la palabra? ¿preferirá estar en silencio en todas las horas de trabajo? Mientras esas preguntas rondaban y el olor a “lechona” se iba disipando, sabía que el señor de adelante dejaría de manejar en algún momento del día para seguramente coger un Transmilenio donde se convertiría en pasajero que ya puede hablar y dejar ver su verdadera ropa.

Estos son algunos de los personajes que se encuentran día a día en el transporte público de Bogotá. Lo importante es detenerse a mirarlos e intentar entender algo de su historia y el por qué están ahí, parados o sentados tan cerca de usted sabiendo que dentro de poco nunca se volverán a ver.

martes, 11 de marzo de 2014

Documentales biográficos para televisión: Su estudio a partir de los conceptos de género y estilo

Autores: Gustavo Aprea y Gastón De Lazzari

 La televisión ha permitido e incentivado a la realización de documentales biográficos debido a su difusión tan rápida y a la gran cantidad de público receptor. Sin embargo, y cómo nos aclara "Documentales biográficos para televisión: Su estudio a partir de los conceptos de género y estilo", hay diferentes maneras de abordar el género documental y hay diferencias evidentes entre este  y las demás ramas del periodismo.

El documental biográfico televisivo, según Aprea y De Lazarri, se fundamenta en un discurso histórico haciendo uso de la antropología, la sociología y la política, lo cual lo distancia del noticiero y del informe periodístico ya que estos dos se ciñen más a la actualidad, la inmediatez y al "marco de la mera información". 

En el texto se hace una distinción importante en cuanto a los tipos de documental que se pueden hacer con el fin de entender las bases de cada uno. El primero (histórico) es aquel que busca narrar y exponer un evento o algún suceso que haya repercutido fuertemente en el aspecto social  y "se
organiza alrededor de una causalidad presentada bajo la forma de un relato". Por otro lado está el documental biográfico, donde el objetivo es mostrar la vida de algún personaje y la singularidad que este pueda llegar a tener.

Para adentrarse más en el documental biográfico, Aprea y De Lazarri permiten ver dos facetas de este en cuanto a la manera de llevarlo a cabo. Se puede hacer una producción de "alta" o "baja" cultura. Las del primer tipo son aquellos que exaltan la singularidad del personaje o del "héroe" que en su contexto histórico logró sobresalir y ser alguien excepcional. La "baja" -también llamada "popular"- busca corroborar, a través de un individuo en especial, características ya conocidas por la sociedad; se dan los ejemplos del "joven esforzado, la actriz sacrificada, el ex-presidente corrupto, etc."
En este corto texto se hace un borrador y se esboza cómo se deben trabajar y cuáles son los fines de los docuementales, en especial los biográficos. Para todo aquel que necesite aclarar sus ideas de este género este texto le sirve como guía ya que obliga a ahondar mucho más en el tema pero sirve como un primer paso para entender qué es y cómo hacer un documental.

martes, 4 de marzo de 2014

Albert Camus : un hombre solo

Documental radiofónico
Realizado por: Radio Nacional de España

Para Albert Camus la soledad podía ser motivo de tener la cabeza gacha incluso frente a su hija Catherine. Sin embargo, la soledad -que él mismo se atribuyó y que este documental corrobora- por más zozobra y escozor que le pudo generar, no fue un impedimiento - probablemente fue un incentivo- para este gran personaje, dramaturgo, escritor e intelectual de la Argelia francesa fallecido en 1960. 

Con un cuadro triste y desalentador empieza este documental radiofónico hecho por la Radio Nacional de España en el año 2013. La confesión del padre a su pequeña hija le da apertura a lo que sería un producto de un poco menos de una hora que logra dilucidadar los 46 años de una vida ajetreada y prolífera. 

Al haberse criado en una familia analfabeta e hijo de una madre sorda (su único amor), nunca tuvo un ambiente donde la lectura y el buen habla fuera importante, así que el francés no fue algo que se le dio con facilidad pero que con un esfuerzo ingente logró dominar para así desenvolverse como uno de los literatos más importantes de su época."Albert Camus: un hombre solo", también se encarga de informar de las diferentes facetas que este personaje tuvo. El periodismo (el cual veía como un deber), el teatro (el cual escribía porque decía ser uno de los sitios donde se sentía más feliz), el deporte y su mentalidad de izquierda (discrepante de la URSS y Sartre), fueron algunas de las cosas a las que dedicó gran parte de su tiempo y esfuerzo.  

Su pasión por la academia, su amplio conocimento, su amabilidad y, por supuesto, su inteligencia, hacían de él un hombre atractivo para los demás. Y aunque el documental asegura que tuvo bastantes amigos, retoma su argumento inicial y presente en su título: ninguno de estos acompañantes perduró, todos fueron temporales.

Este es un trabajo que permite conocer de una manera afable y sencilla a una de las grandes mentes que tuvo el siglo pasado. Con un sin fin de efectos sonoros y canciones, se logra ambientar al oyente en aquella época. Las diferntes voces de expertos en el tema, de su hija y de él mismo, dejan en claro el ser solidario,  equitativo, admirado y, sobretodo, solitario que llegó a ser Camus. 

Acá le dejo, querido lector, el link de este producto radiofónico para que se deleite con la vida de este hombre: http://www.rtve.es/alacarta/audios/documentos-rne/documentos-rne-albert-camus-hombre-solo-09-03-13/1712722/

Buen día.